Soy un viudo joven, ¿qué puedo hacer?
Apreciado Pastor y Orientador familiar Víctor Súchite: Le comento que hace dos años perdí a mi esposa en el momento que ésta dio a luz a nuestro segundo hijo. Las emociones encontradas en aquel momento eran muy fuertes. Por un lado, la felicidad de tener en mis brazos a mi segundo retoño. Por el otro, la desgarradora dolencia de la separación física inesperada de mi esposa. El proceso de duelo fue largo. Han pasado dos años haciendo ajustes y reorganizando mi vida personal y familiar, ahora como papá soltero”. ¿Cómo puedo mejorar mi estado emocional como persona viuda?
Gracias por contar su triste historia. Como sabemos, la vida de los viudos no es cosa fácil. El Apóstol Pablo, aconseja en 1 Corintios 7:8 lo siguiente: “Digo, pues, a los solteros y a las viudas, que bueno les fuera quedarse como yo; pero si no tienen don de continencia, cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando”. Pablo le habla tanto a los solteros que nunca se han casado, como a los viudos o solteros por segunda vez ante la pérdida de su cónyuge. Se cree que el mismo Apóstol había enviudado y luego decidió permanecer soltero el resto de su vida, para servir a Jesucristo. De modo que algunos viudos nunca vuelven a casarse, mientras que otros deciden reiniciar una nueva vida conyugal. Muchos se encuentran en un dilema: ¿Quedarse viudos el resto de la vida o volver a contraer matrimonio? A veces, los hijos padre viudo o madre viuda, diciéndoles que si se casa de nuevo, ofendería la memoria de su difunto cónyuge. Otros hijos ven la situación de otra manera, consideran que su padre viudo por ejemplo, necesita compañía y que aunque nadie podría reemplazar jamás a su madre, es importante que su papá viva acompañado, pues la soledad no es una buena compañera. Sin embargo, lo importante es lo que piensa y siente la persona que está experimentando la viudez.
En es su caso, le doy un consejo práctico: Considere las ventajas y desventajas de permanecer viudo o de volverse a casar. Aunque la mayoría de viudos vuelven a casarse, ya que los hombres viudos se casan un 22% más que las mujeres viudas, no forme una nueva familia precipitadamente. Considérelo seriamente y háblelo con sus hijos aunque éstos sean pequeños. Cuide responsablemente de sus hijos y busque el apoyo de los suyos.